El tradicional discurso navideño de la monarca británica estuvo marcado por un mensaje emotivo, donde hizo mención a su fe cristiana y al recuerdo de la pérdida de su esposo, el príncipe Felipe.
La monarca de 95 años dijo que si bien la Navidad es una época de alegría, para muchas familias que han perdido a sus seres queridos ha sido una época difícil. Ella dijo que este año, especialmente, entiende por qué.
El príncipe Felipe murió a los 99 años en abril de 2021, después de 73 años de matrimonio con la reina Isabel.
A pesar de la ausencia de su esposo, la reina reveló que la llegada de sus nietos renovó la alegría de la familia. “Nos enseñan una lección, al igual que la historia de Navidad, de que en el nacimiento de un niño, hay un nuevo amanecer con un potencial infinito”, dijo.
La reina comparó el gozo del nacimiento de un niño con el retoño del nacimiento de Cristo, cuyas enseñanzas considera el "fundamento" de su fe.
“Es esta simplicidad de la historia de Navidad lo que la hace tan universalmente atractiva: eventos simples que formaron el punto de partida de la vida de Jesús, un hombre cuyas enseñanzas se han transmitido de generación en generación y han sido el fundamento de mi fe".
“Su nacimiento marcó un nuevo comienzo. Como dice el villancico: "Las esperanzas y los temores de todos los años se han encontrado en Ti esta noche".
El himno mencionado por la reina es "La pequeña aldea de Belén", escrito por el pastor Phillip Brooks.
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