El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, resaltó en un discurso, la importancia de Dios en la fe de de la población, así como el respeto a la familia tradicional como política de Estado.
Bolsonaro se dirigió al país en cadena nacional, con motivo del aniversario de la Independencia de Brasil, el 7 de setiembre, destacando las luchas que el país ha librado contra el nazismo y el fascismo en Europa, pero también contra el comunismo en su mismo territorio.
"En el siglo XX, durante la Segunda Guerra Mundial, la Fuerza Expedicionaria Brasileña fue a Europa para ayudar al mundo a derrotar al nazismo y al fascismo", comentó.
"En la década de 1960, cuando la sombra del comunismo nos amenazaba, millones de brasileños, identificados con los anhelos nacionales de preservación de las instituciones democráticas, salieron a las calles contra un país superado por la radicalización ideológica, las huelgas, el desorden social y la corrupción generalizada", agregó.
En sus palabras pronunciadas en unos cuatro minutos, Bolsonaro destacó la riqueza cultural del país, fruto del gran mestizaje entre razas a lo largo de sus más de 500 años.
“La identidad nacional se empezó a diseñar con el mestizaje entre indios, blancos y negros. Posteriormente, oleadas de inmigrantes se sucedieron, trayendo esperanzas que en sus tierras habían perdido. Se asimilaron y respetaron religiones, creencias, comportamientos y puntos de vista”, dijo.
El presidente celebró el crecimiento del país, no solo en territorio, sino también en su avance diplomático.
"Después de casi dos siglos de independencia, en los que enfrentó y superó innumerables desafíos, Brasil consolidó su posición en el concierto de las naciones", agregó.
Al final de su discurso, el presidente destacó como positiva la fe del pueblo brasileño en Dios, su patriotismo y su expresado deseo de defender los Derechos de la Familia.
“Somos una nación temerosa de Dios, que respeta a la familia y ama a su Patria. Orgulloso de ser brasileño”, finalizó. AcontecerCristiano.Net
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