El pastor John MacArthur presentó una demanda contra el estado de California por emitir una segunda orden de bloqueo debido al coronavirus. Entre las restricciones sancionadas por el gobernador Gavin Newsom se encuentra la prohibición de reunirse en los templos religiosos.
John MacArthur, pastor de la iglesia Grace Community Church en Los Ángeles, comenzó a realizar servicios cerrados como una "protesta pacífica", a pesar de que se le advirtió que podría enfrentar multas o encarcelamiento.
"Jesus es el Señor. Él es la cabeza de nuestra iglesia. El gobernador Newsom no es la cabeza de la iglesia. El alcalde de Los Ángeles, (Eric Garcetti, no es la cabeza de la iglesia”, dijo el pastor a Fox News a principios de este mes.
MacArthur había cerrado las puertas de la iglesia a mediados de marzo debido a la pandemia de Covid-19. La iglesia reabrió a fines de julio, pero recibió una notificación del Ayuntamiento de Los Ángeles para poner fin a los servicios presenciales o enfrentarse a una "responsabilidad civil y penal".
Los abogados Jenna Ellis y Charles LiMandri, que representan al pastor y a la iglesia, explican que Grace Community Church ha cumplido con las órdenes estatales durante casi seis meses, pero los decretos recientes de California, que exigen un cierre indefinido, van más allá de ser " racionales o razonables” y avanzan hacia la “tiranía y la discriminación”.
Cristo es autoridad superior
La demanda, que se abrió el miércoles pasado (12), sostiene que los funcionarios de California han hecho una excepción "cuando muchos tomaron las calles para participar en protestas políticas contra el racismo y la brutalidad policial", mientras que "los manifestantes se negaron cumplir con las restricciones”.
"Simplemente continuamos haciendo hoy lo que hemos estado haciendo durante los últimos 63 años, desde que se inauguró la iglesia: dar la bienvenida a la comunidad de Los Ángeles y satisfacer sus necesidades espirituales", dijo MacArthur en un comunicado. "Permaneceremos abiertos y enseñaremos el Evangelio de Jesucristo a todos los que quieran venir y adorar con nosotros".
“El orden bíblico es claro: Cristo es el Señor del César, no al revés. Cristo, no César, es la cabeza de la Iglesia. Por otro lado, la Iglesia no gobierna el estado de ninguna manera. Nuevamente, estos son reinos separados, y Cristo es soberano sobre ambos. Ni la Iglesia ni el Estado tienen una autoridad superior a la del mismo Cristo, quien declaró: "Toda autoridad me fue dada en el cielo y en la tierra", dijo el pastor, refiriéndose a Mateo 28:18. AcontecerCristiano.Net
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