Madre se niega abortar bebé con anomalía y el hijo nace perfecto: "Oramos mucho"

GEORGE WEST, Texas.- Una madre, que rechazó abortar a su bebé, a pesar que le dijeron que tenía una anormalidad grave, oró por un milagro y su hijo nació completamente sano.

Kate Mckinney, madre de tres hijas, le dijeron que su hijo que estaba por nacer tenía una malformación del sistema linfático, y que era tan grande que no podría sobrevivir. Le aconsejaron abortar, pero la mujer le dijo a los médicos que ella no abortaría a su hijo.

Kate, con 18 semanas de gestación, consultó a un médico especialista, quien no le dio esperanzas de que el bebé sobreviva. "No había nada que hacer, porque el bebé tenía un higroma quístico. Esto significa que podría tener trisomía, un defecto estructural o sus órganos podrían no desarrollarse adecuadamente.

Ante el diagnóstico, el médico intentó convencer a Kate para que abortara. "Le dije que no había cómo abortar, que no podía hacer eso", respondió la mujer.

Cuando Kate fue enviada al laboratorio para hacerse un examen de sangre, una enfermera trajo una palabra de fe. "Ella suavemente colocó la mano en mi brazo, me miró y me dijo: "Sólo ten fe. Nada es imposible para Dios". Sé que Dios la puso allí ese día para decirme eso. Necesitaba escuchar eso. Su nombre era Whitney, y nunca más la vi en aquel consultorio médico en las más de 20 veces que estuve allí. Ella fue mi ángel aquel día".

"Nosotros oramos mucho. Le pedí a Dios por un milagro la noche anterior a mi consulta de 26 semanas", cuenta.

En la consulta, el técnico de ultrasonido no midió el tamaño del higroma quístico y Kate temió recibir una mala noticia. Sin embargo, un médico que la atendió por primera vez, dijo de manera dulce y suave: no hay nada más que medir.

El hijo de Kate nació en perfecto estado. "Los médicos se sorprendieron tanto que ellos hicieron varios exámenes posibles tratando de descubrir algo que podría estar equivocado con él. Todos dieron negativo", celebra la madre.

"El bebé que tenía un 0% de probabilidad de sobrevivir está aquí y está sano", destacó. "Creo firmemente que mi fe ha sido probada durante este embarazo. Dios quería ver si yo haría lo impensable. Él quería ver si yo creía en Él para sanar a nuestro bebé. Estoy feliz de haberlo hecho. No hay nada imposible para Dios", dijo Kate. AcontecerCristiano.Net