El número de cristianos evangélicos en Asia está creciendo de una manera asombrosa, en comparación con otros lugares del mundo.
Según los datos proporcionados por la revista "The Economist", en 2015 se registró más de 200 millones de cristianos evangélicos en Asia, contra 17 millones en 1970. Las congregaciones más grandes están en Corea del Sur y Filipinas, donde las mega-iglesias poseen decenas de miles de fieles.
Rápido crecimiento en Singapur. De acuerdo con Terence Chong, las mega-iglesias comenzaron a surgir a principios de la década de 1990 y crecieron rápidamente, a pesar del hecho de que el gobierno de Singapur mire a los proselitistas como "agitadores de tensiones religiosas". Los evangélicos, incluyendo muchos pentecostales, constituyeron el 8% de la población en 2015, mientras que el 2% en 1970.
En países de mayoría musulmana, como Indonesia y Malasia, el cristianismo crece, a pesar de que el evangelismo entre la mayoría musulmana es casi imposible, los budistas, confucianos, y adeptos de otras declaraciones de fe, casi todas étnicamente chinas, se están mostrando receptivos al mensaje del Evangelio.
Aproximadamente un décimo de la población de ambos países es cristiano, pero los burócratas hacen la vida difícil para las iglesias, en gran parte por el temor que tienen de que traten de convertir a la mayoría musulmana.
Más de 1.000 iglesias se cerraron en Indonesia entre 2006 y 2014, contó Andreas Harsono, del Observatorio de los Derechos Humanos, un grupo que pretende proteger las libertades de las minorías en estas regiones. En Malasia, es ilegal que un musulmán se convierta al cristianismo, aunque la constitución consagre teóricamente la libertad de religión.
Además, Malasia tiene policías islámicos para garantizar que los musulmanes no se casen con adeptos de otras religiones o se desvíen de otras maneras. A pesar de este escenario de represión, la proporción de la población evangélica creció rápidamente. AcontecerCristiano.Net
COMENTA: Más de 200 millones de evangélicos hay en Asia, a pesar de persecución