Un médico ateo se propuso leer la Biblia con el objetivo de refutar a los cristianos que le hablaba acerca de Dios, pero terminó entregando su vida a Cristo.
El Dr. Greg Lehman, es un exitoso médico, con una casa lujosa, autos lujosos y una alta posición económica; pero aún teniéndolo todo, le faltaba algo que su dinero no podía comprar: la paz.
"¿Qué me pasa? ¿Por qué no estoy satisfecho? ¿Por qué no siento que he logrado lo que hice durante toda mi vida?" se preguntaba a sí mismo.
Fácilmente se irritaba con la gente, incluso con su propia esposa y sus vecinos cristianos, a quienes calificó de "hipócritas" por vivir un estilo de vida, que según él, no se ajustaba a las enseñanzas de la Biblia.
Para exponer la hipocresía de sus vecinos cristianos, decidió leer en profundidad la Biblia para poder refutar las Escrituras frente a ellos.
Pero entonces algo extraño sucedió. Mientras leía la Biblia, fue sorprendido por la afirmación del Evangelio, de que Jesús era Dios hecho carne, enviado para redimir a la humanidad del pecado sacrificándose a sí mismo. Pero esto no sería verdad, y el cristianismo no tendría sentido, si no fuera por su resurrección.
Se olvidó por completo de sus vecinos y se sumergió en seguir estudiando la Biblia para demostrar que la resurrección de Jesús era simplemente esto: "Los apóstoles podrían haber robado el cuerpo. Podría ser simplemente una alucinación", reflexionó.
Pero después de toda la información que pudo reunir, Lehman llegó a una conclusión sorprendente: Jesús se levantó de la tumba.
El relato de Lucas sobre la resurrección de Jesús lo impresionó. Aquí estaba un compañero médico, un hombre de ciencia, que atestiguaba la verdad sobre el milagro de la resurrección de Jesús.
El relato de Pablo sobre el milagro fue el factor decisivo. "Estaba matando a cristianos. No tenía nada que ganar. ¿Qué podría hacer que este hombre se convierta en el más grande evangelista de todos los tiempos?", dijo Lehman. "Hubo una sola explicación y fue que vio al Señor Jesucristo resucitado. Cuando miré la evidencia y miré a estos hombres y sus vidas cambiadas, dije: 'Tengo que creerlo'".
Su despertar cristiano cambió completamente la vida de Lehman. Culminó en que él se derrumbó, lloró y le pidió perdón a Dios.
Una gran sensación de tranquilidad se apoderó de él, desvaneciendo por completo el descontento y el vacío en su interior. "Estaba completamente en paz", dijo en una entrevista.
Su esposa, Ruth, nunca podría ser más feliz. "Siento que tengo un nuevo esposo", dijo.
"En toda religión es el hombre que busca a su dios. Pero en el cristianismo es el mismo Dios que busca al hombre. Cuando uno clama a Dios, Él no sólo nos perdona nuestros pecados, sino que también se revela a nosotros, para que sepamos que Él es real. Esa es la gran diferencia", dijo Lehman. AcontecerCristiano.Net
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