Los líderes cristianos tienen la esperanza en estos jóvenes, que puedan llevar el mensaje del Evangelio a su país y dar a conocer el amor de Dios a toda persona.
La población de China es cada vez más joven. Hoy en día, las grandes ciudades como Shanghai están llenos de jóvenes. 24 millones de personas viven en Shanghai y tres cuartas partes de ellos están entre las edades de 20 y 33 años, según CBN.
"Me mudé a Shanghái hace unos años. Mis amigos me decían que podría encontrar mejores puestos de trabajo aquí. Deseo ganar más dinero para mi familia", explicó Zhao Qiang.
Además de buscar empleo, muchos jóvenes se están uniendo a la comunidad cristiana. Para hacer frente a la presión social , los jóvenes recurren a la iglesia en busca de grupos de apoyo espiritual.
Los líderes cristianos en Shanghái, dicen que los jóvenes asisten a la iglesia en busca de paz y tranquilidad, donde puedan "descansar" de las labores cotidianas y tener un espacio para "expresarse abiertamente".
"Vivir en la gran ciudad no es fácil para ellos. Muchos jóvenes me dicen cómo enfrentan sus cargas todo el tiempo. Algunos lloran y me piden ayuda", dice Kate Gu, de la Iglesia Internacional de Shanghai.
Los líderes de la iglesia usan verdades bíblicas para ayudar y aconsejar a los jóvenes a afrontar la vida. Ellos comparten sus experiencias y hablan de la gracia de Dios.
Con la ayuda de los líderes, algunos jóvenes chinos asisten a los servicios regularmente. Aprenden a orar por ellos mismos y por su familia y ya no siente el vació por dentro.
"Ahora, soy un cristiano y no tengo miedo de nada. Jesús está siempre conmigo. No estoy solo cuando me enfrento a dificultades. No veo a la iglesia como un edificio, para mi es una familia", dice un joven.
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