"Te daré 15 días para que decidas abandonar tu fe cristiana. Si decides no hacerlo, ya no serás considerada mi hija y no serás parte de la familia". Las palabras de su padre se sentía como el golpe de un martillo para Nedjma, que siempre había tenido una buena relación con su padre y el resto de su familia.
"No habrá ningún contacto entre nosotros", continuó. Este hombre, profundamente enraizada en una versión radical del Islam, no podía vivir con la elección que había hecho su hija. Le dijo estas duras palabras después que descubrió que se había convertido a Jesucristo. Nedjma ya había sido cristiana por más de 10 años, pero era una creyente en secreto dentro de su familia.
Debido a los lazos familiares son tan importantes en el Medio Oriente, que quería mantener la relación con su padre. Ella siempre mantuvo un profundo respeto por él. Hace poco, su padre fue a visitar. Vive con Rafik, su esposo cristiano. El padre de Nedjma tampoco conocía la fe cristiana de su yerno.
Desde el comienzo de su matrimonio, Nedjma y Rafik siempre lograron ser evasivo en conversaciones y discusiones con su padre y la familia sobre religión. Esta vez no hubo escape de decir la verdad. Rafik cuenta lo que sucedió.
"Debido a que insistía en insistía en que rezáramos oraciones musulmanas, tuve que decirle que, como cristiano, yo oro en la forma en que Jesús enseñó en los evangelios. Luego se volvió hacia su hija y le preguntó: "¿Y tú? ¿También un cristiana? ' Mi esposa respondió que sí. Su cara se puso roja y la ira ardía en sus ojos". Luego, salió de la casa.
Dos días más tarde, los visitó de nuevo. "Nos explicó que en el Islam, un apóstata merece ser asesinado si él o ella no volvía al Islam. Él no nos amenazó con matarnos, pero dejó claro que él quería que renunciáramos a nuestra fe cristiana", continúa Rafik . "Él le dio a mi esposa un período de quince días para tomar la decisión de darle la espalda a su fe cristiana. Hizo esto después que pidió la opinión de un imán que le aconsejó en esta situación".
Finalmente, no renunciaron a su fe cristiana a pesar de saber que perderían a su familia. "Oramos por mi padre; para que el Señor abra sus ojos, y que sea tocado por la gracia de Dios y también se convierta a Cristo", agregó Nedjma, a las palabras de su esposo.
Dos días más tarde, los visitó de nuevo. "Nos explicó que en el Islam, un apóstata merece ser asesinado si él o ella no volvía al Islam. Él no nos amenazó con matarnos, pero dejó claro que él quería que renunciáramos a nuestra fe cristiana", continúa Rafik . "Él le dio a mi esposa un período de quince días para tomar la decisión de darle la espalda a su fe cristiana. Hizo esto después que pidió la opinión de un imán que le aconsejó en esta situación".
Finalmente, no renunciaron a su fe cristiana a pesar de saber que perderían a su familia. "Oramos por mi padre; para que el Señor abra sus ojos, y que sea tocado por la gracia de Dios y también se convierta a Cristo", agregó Nedjma, a las palabras de su esposo.
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