Un cristiano que llevaba Biblias a Vietnam pudo pasar sin obstáculos los controles policiales, lo que ha sido aclamado como un milagro.
Según Merv Knight , cofundador de Voice of the Martyrs Australia (VOM), el hombre anónimo se sintió llamado por Dios para llevar Biblias hacia una parte remota de Vietnam, y su única forma de hacerlo era viajar en un autobús público. Estos pasan por los puntos de control regulares de la policía, y cualquiera que sea sorprendido portando Biblias sería llevado a prisión y posiblemente torturado.
Sin embargo, un capitán de policía uniformado se sentó junto al hombre y colocó su sombrero sobre la caja de Biblias. Luego, el oficial se durmió durante todo el viaje y, debido a su sombrero, el contenido de la caja no fue revisado.
“Repetidamente durante las próximas 10 horas, control tras control, el capitán de la policía se durmió y los guardias pasaron silenciosamente sin siquiera marcar la casilla”, informó VOM.
La historia ha cobrado fuerza por ser muy similar a las que comparte el hermano Andrew, conocido como el "contrabandista de Dios", que distribuyó Biblias en los países comunistas durante la Guerra Fría.
La constitución vietnamita garantiza la libertad de religión en principio, pero, al igual que China, el gobierno comunista controla estrictamente la práctica religiosa independiente. Según la Comisión de Estados Unidos para la Libertad Religiosa Internacional (USCIRF), reprime a "individuos y grupos religiosos que considera que desafían su autoridad, incluidos budistas independientes y cristianos".
Varios defensores de la libertad religiosa siguen encarcelados en el país y las autoridades han "actuado con decisión" en los últimos años para restringir aún más la libertad de expresión y religión, dice la USCIRF. Los grupos religiosos tienen que registrarse formalmente con el gobierno, pero se les niega rutinariamente.
A pesar de esto, la Sociedad Bíblica Vietnamita ha estado trabajando en el país desde finales del siglo XIX. La Biblia en el idioma común vietnamita se publicó por primera vez en 1993 y, desde entonces, se han impreso y distribuido en Vietnam más de 700.000 Biblias y dos millones de copias del Nuevo Testamento.
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