Para Moore, los creyentes en la Biblia son cada vez más forzados a aceptar las imposiciones de los líderes de la nación. Que alivia la presión sobre ellos, pero les hace olvidar que fueron "llamados a ser testigos fieles" y que "pertenecen a otro reino".
En su discurso, resaltó que la llamada “guerra cultural”, está siendo perdida por las iglesias que cada vez más aceptan los valores del mundo, absorbiendo el discurso materialista e ignorando que deberían ser una “minoría profética”. Fue enfático: "ahora tenemos la oportunidad de deshacerse del viejo y obsoleto nominalismo... la oportunidad de huir de la teología izquierdista [liberación] y de derecha [de prosperidad]... y volvernos a preocupar a ser la iglesia de Jesucristo".
Denunció que “el cristianismo nominal, meramente cultural, ha unido a Jesús el discurso capitalista. Ese que dice:Puedes tener todo lo que siempre has querido”. Por último, lamentó que la iglesia de hoy sea demasiada tolerante con el sexo antes del matrimonio, el divorcio, la convivencia y la prostitución. Existe el temor que pronto el aborto y la homosexualidad sean aceptados. Hizo un llamado a la iglesia a seguir más de cerca la Palabra del Señor Jesús, estar dispuesto a dar, si fuera necesario, la vida por las "misiones que está anclada en la cruz”.
Mientras el pastor Moore se ha dirigido a los evangélicos estadounidenses, el contenido de su mensaje bien puede servir para reflejar la situación que las iglesias cristianas están viviendo en otras partes del mundo.
Moore, fue elegido hace dos semanas como presidente del Comité de Ética y Libertad Religiosa de la Convención Bautista del Sur, desafió a los cristianos a “recuperar la voz profética de la Iglesia, a partir de una transformación interna para no perder de vista su misión central”. AcontecerCristiano.Net
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