BRASIL.- Los directivos de la Iglesia Cristiana Maranatha, son acusados de desviar por lo menos 21 millones de riales en los últimos años. La red de involucrados incluye a pastores, diáconos y proveedores.
La investigación está siendo realizada por el ministerio público del estado de Espírito Santo, después que la misma instituciñon hiciera la acusación.
Los investigados son Ángel Antonio Pereira dos Santos y el contador de Maranatha, Leonardo Meirelles de Alvarenga. Tres pastores más y un diácono fueron sacados de sus cargos administrativas y religiosos por la junta de la Iglesia, que señala ha adoptado medidas contra las irregularidades, según publica Gospel Prime.
Aprovechando la exención de impuestos y que las iglesias han donado dinero mensualmente por medio de los fieles, algunos dirigentes hicieron uso ilegal. Entre los crímenes cometidos son: desvío de fondos en el extranjero, la creación de un autor corporativo, contrabando, fraude a la Hacienda y del sistema financiero.
El caso involucra directamente a los miembros del presbiterio de la iglesia de Vila Velha, donde administran casi 5.000 templos en todo Brasil. El sistema de Maranatha, opera en una sola caja, por lo que el flujo de caja es muy grande y un mayor control es difícil. Aunque la Iglesia no informa sobre aumentos de sueldo, pero dice que es una de las más de rápido crecimiento en el país.
Las cuentas de la iglesia, sufrieron un retraso de al menos cuatro años. Esto generó una investigación interna de la iglesia, lo que generó una auditoría externa. Después de confirmarse las irregularidades, una denuncia formal fue presentada.
El bogado de iglesia, dijo que la iglesia no acepta las justificaciones de los implicados que lo hicieron todo movido por una “visión de Dios”.
También señala que a pesar de la gravedad de los hechos, la iglesia está tranquila y todos tomaron medidas para preservar la institución y el reembolso de los daños causados por el mal uso. Sin embargo, las quejas han causado finalmente la rebelión de un gran grupo de fieles que decidieron dejar la iglesia.
AcontecerCristiano.Net
La investigación está siendo realizada por el ministerio público del estado de Espírito Santo, después que la misma instituciñon hiciera la acusación.
Los investigados son Ángel Antonio Pereira dos Santos y el contador de Maranatha, Leonardo Meirelles de Alvarenga. Tres pastores más y un diácono fueron sacados de sus cargos administrativas y religiosos por la junta de la Iglesia, que señala ha adoptado medidas contra las irregularidades, según publica Gospel Prime.
Aprovechando la exención de impuestos y que las iglesias han donado dinero mensualmente por medio de los fieles, algunos dirigentes hicieron uso ilegal. Entre los crímenes cometidos son: desvío de fondos en el extranjero, la creación de un autor corporativo, contrabando, fraude a la Hacienda y del sistema financiero.
El caso involucra directamente a los miembros del presbiterio de la iglesia de Vila Velha, donde administran casi 5.000 templos en todo Brasil. El sistema de Maranatha, opera en una sola caja, por lo que el flujo de caja es muy grande y un mayor control es difícil. Aunque la Iglesia no informa sobre aumentos de sueldo, pero dice que es una de las más de rápido crecimiento en el país.
Las cuentas de la iglesia, sufrieron un retraso de al menos cuatro años. Esto generó una investigación interna de la iglesia, lo que generó una auditoría externa. Después de confirmarse las irregularidades, una denuncia formal fue presentada.
El bogado de iglesia, dijo que la iglesia no acepta las justificaciones de los implicados que lo hicieron todo movido por una “visión de Dios”.
También señala que a pesar de la gravedad de los hechos, la iglesia está tranquila y todos tomaron medidas para preservar la institución y el reembolso de los daños causados por el mal uso. Sin embargo, las quejas han causado finalmente la rebelión de un gran grupo de fieles que decidieron dejar la iglesia.
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