En 2007, la organización Shavei Israel, que tiene como objetivo “ayudar a los descendientes de judíos a reconectarse con el pueblo y el Estado de Israel” y facilitar su aliá (inmigración), había llevado a 230 personas, pero el proyecto fue congelado por el gobierno de Ehud Olmert.
Michael Freund, su presidente y fundador, está muy agradecido y anunció que en diciembre llegará un primer grupo de 275 personas y que su entidad se hará cargo de los pasajes aéreos y de parte de la estancia inicial en el país en un centro privado de absorción que pretende abrir, donde harán su conversión supervisada por autoridades rabínicas y completarán una serie de procesos burocráticos que les permitirán recibir el estatus de inmigrantes y la nacionalidad israelí, antes de mudarse al Norte, a lugares como Acco y Kiryat Malachi.
El “retorno” de los Bnei Menashe es un “milagro de proporciones bíblicas e históricas”, finalizó.
Mientras tanto, esas 275 personas están aprendiendo hebreo y tradiciones judías y se están familiarizando con la vida en Israel en centros de Shavei Israel en la India.
Esta entidad trasladó a unos 1.700 Bnei Menashe en los últimos 15 años, pero otros 7.000 esperan tener la misma suerte. AcontecerCristiano.Net
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